sábado, octubre 08, 2005

Drums

Empatía y autocrítica. Suenan a los enemigos de la pizza con champagne. Quizas hay que sentarse en una mesa a comer pizza con champagne (si se puede tomar alcohol) e intentar mejor el grado de insight pero mas de ponerse en el lugar del otro.
Es que estoy escuchando a Ivete Sangalo y entro en trance. Ella y Babatunde Olatunji tienen ese efecto sobre mi.

Hay miles de maneras de arruinarlo. Desde la primera frase, la tercer mirada, el quinto gesto o la ultima despedida. Cuantas mas dimensiones y emprendimientos, nuevas formas de desperdicio.
En el desierto el agua se escurre entre nuestras manos por que pensamos en un Oasis.
El código para entender este mensaje es el Da Vinci: Malo y pretencioso.

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