viernes, agosto 20, 2004

Salpica, sal

Sé, que aún, nos queda una oportunidad. (Gloria Stefan ¿No?)
Ojalá

Mi vida toma el camino que deseo. Recomienzo pintura con mi viejo maestro. A pesar de que este en Barcelona. Su taller está más poblado que de costumbre, con nuevos y viejos personajes. El paraíso, donde el tiempo deja de ser lo importante, donde dejo que la música entre y que todo fluya.
De repente ya me fui de ahí, y estoy caminando por una calle perpendicular al Rio, de esas calles sombrias, y entre fastfowards y slowmotions un grupo de travestis chilenos altos comienza a seguirme, me quieren tocar. Comienza la inundación. No se me ocurre mejor idea que simular una parálisis y una convulsión para que no me violen, pero no me creyeron.
Ahí me desperté y comenzó otro día de guardia. La medicina inunda mi vida y la vuelve negra y sombría. NI tiempo ni ánimos para escribir algo diferente acá.
Para que sepan. Para los que preguntaban cosas (aunque creo que lo sabían los que preguntan) no uso reloj. Mejor dicho nunca use reloj hasta este año. Quiero que el tiempo me deje de importar. Quiero que la vida no sea tachar palitos del encierro hasta que la cabeza salga a flote y poder respirar hondo. Y me imagino que mi bocanada cuando salga va a ser tan profunda que ya saben el por que si en unos años se acaba el oxigeno de la atmósfera toda.

0 comentarios:

About Me